Los árboles lucían el reflejo de los soles de otoño.
Mientras miraba alucinada los ocres, verdes, amarillos de sus hojas,
la leve brisa provocaba, en su toqueteo amoroso,
una sinfonía que agudizaba mis sentidos.
Caminaba lentamente rumbo “a ningún lado”
cuando vi tu figura graciosa,
tu mano en otra mano, tus ojos brillar.
Seguí tu camino a la distancia.
Escuché las risas sueltas sin pudor,
vi encenderse tus mejillas,
tomarla de la cintura, acercarla,
fundirse en un beso sin fin.
En ese instante
perdoné al gato hambriento
que atrapó al gorrión en vuelo.
04/02/2011
Imagen: Paisaje de Otoño (Vincent Van Gogh)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Tu pluma describe a un otoño perfecto, le has puesto letra a la obra de Vincent!!, sin embargo me quedo con grandeza del perdòn a la infidelidad.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Lo que es real es la angustia que me provoca presenciar la caza...
Eliminar¿perdonar en una situación así? (es imaginaria, ojo) ¿soy "propietaria" de alguna vida? ¿cuál sería mi "derecho" para planteármelo?
Es un tema lo suficientemente conflictivo al cual sólo se le ven los perfiles filosofando en una "mesa de café".
Un abrazo
El otoño... perfecto momento de amar.
ResponderEliminarEn otoño caminamos sobre colchones de hojas ocres... las pisamos... las trituramos... murmuran... las escuchamos... las muy ladinas suelen fantasear... "andan voladas" dice una amiga...
Eliminarque bello eso, que recuerdo, me encantó
EliminarGracias Profe, para que no sea sólo un recuerdo el próximo otoño salí a caminar las callecitas arboladas de Baires... Un espectáculo!!!!!!
Eliminarprometo, pero tus palabras me dispararon el recuerdo del crujir y lo mullido y los olores, son recuerdos viejos y más recientes acumulados sin personas solo yo y el parque, o el bosque y el otoño. Los bosques septentrionales tiene múltiples tonos de amarillo, naranja y hasta verde u ocre es toda una paleta y un desafío pintarlos. Me gusta pintar solo que no pinto como vos manejas el arte de las palabras eso de inspirarte en una pintura y construir una historia de sensaciones o de amores pasados o de...
EliminarGracias Profe, es que a veces "ando volada" y, en otoño, las historias me inventan.
EliminarEl otoño es estar solo pero no en soledad.
El otoño es infinitos colores... Si pudiera pintarlos... Sólo puedo admirarlos... Ponerle alguna palabra... Palabras que no pesan lo mismo que la belleza que se me presenta...
Muy lindo tu relato Hilda, no intento interpretarlo creo que el título que elegiste deja abierta, como debe ser múltiples interpretaciones. es impresionante la ilustración, es un otoño europeo increíble de una belleza deslumbrante, una elección perfecta.
ResponderEliminarUn abrazo
Creo que no se ajusta a ninguna interpretación... en este caso, surgió al ver la pintura... ese otoño es para "espiarlo" y encontrarle secretos...
EliminarUn abrazo
Es su naturaleza. Distinto a nosotros que podemos discernir y atrapamos presas igual por pura codicia (y no solemos pedir perdón).
ResponderEliminarMe angustia presenciar la caza... Me angustia terminar la vida de otro ser... No puedo ni ir a pescar -fui una sola vez-
Eliminar"Me criaron" carnívora y seguí siéndolo pero me conflictúa este tipo de alimentación -se me pasan rápido- Consumo mucho pescado... y no pido perdón.
Daniel me gustaría decir que tenés razón pero no puedo. Todos los animales depredadores (es decir que se alimentan de otros animales) tienen conductas similares a los humanos. Me refiero claro a que la caza cumple unas funciones naturales que van más allá de la mera alimentación. El aprendizaje de los cachorros, el entrenamiento en los adultos y, porque no, el goce, el simple goce que provoca en ellos y en nosotros humanos la descarga de adrenalina. En los animales es instintivo saltan como un resorte cuando ven a la presa, en los humanos es más cerebral, aprendido y premeditado pero el objetivo es similar. No somos una especie caída del cielo, se que eso lo sabés, ni tampoco hijos del demonio, somos depredadores y estamos al tope de la cadena alimentaria. Podemos si cambiar sus consecuencias, controlar nuestra naturaleza, los animales no. Eso es lo que nos diferencia.
ResponderEliminarUFFFFFFFFFFFF! con tanto calor me cuesta imaginar el otoño que es mi estación preferida!!! Renacer de colores "crujientes" manos entrelazadas, caminata sobre las hojas.... todo un poema!! Bello, Hilda. Beso Isa
ResponderEliminarBueno Isa!!!! pero el calor no es eterno!!!! (además, es algo que suele suceder en verano...)
EliminarGracias por, a pesar del calor, haber leído algo de otoño... Un abrazo (apenas empiece el fresco organizamos lo del museo jaja)Besos
Estaba disfrutando del paisaje otoñal, la sinfonía de colores ,etc...y de repente me vuelvo a la realidad con ese gato maldito que atrapa al gorrión. Me gusto la descripción, a imagen es como yo lo siento; es la estación de preferencia.
ResponderEliminarAbrazo Estela Z
y de quién era la figura graciosa??¡y cómo esa mano, tomaba la que vos querías?
ResponderEliminarAmas a los pájaros y las flores
El gato que atrapó al gorrion en vuelo, recibió el perdón (tuvo suerte)
pero la de la mano atrevida, que se prendió de la mano del de graciosa figura, ese si que no!!
Me hiciste acordar de mis épocas de adolescente, en que los celos me carcomían, hasta que aprendí, gracias a Dios, que el otro es libre
Y que la libertad le hace feliz
Y si el amado es feliz, eso me debe hacer feliz.
Los celos; son los parientes de la envidia, ¿no?
HERMOSO EL CUADR
HERMOSO EL PERDÓN
CARIÑOS
Claudio... ¿empezamos de nuevo? jeje imagine amigo, imagine... hace bien...
EliminarDe ser gato, me la comía a la que se prendió de aquella mano!!!!
Qué época aquella cuando unx celaba!!!
Un abrazo
POBRE MANO!!!!
EliminarJAJAJAJAJA!!!!
ME HAS HECHO REIR Y ME VINO MUY BIEN
TE CUENTO, QUE LA ANATOMÍA PATOLOGICA DE MI OPERACIÓN DIO BIEN.
GRACIAS A DIOS
¿Qué mano? Me comía, mano, brazo, hombro y todo lo que seguía!!!!!!
EliminarSabía que iba a dar bien!!!!!! SABÍA!!!
Un abrazo inmenso, estoy refeliz!!! Un abrazo "a las tuyas" y, ya que estoy "al nene" también