sábado, 26 de marzo de 2011

Luis de Noviembre

Sentada en el patio,
la brisa de primavera
acaricia mi cara.
La luna redonda
pierde su brillo
en el cielo de la madrugada.
Los zorzales emprenden vuelo,
con alas quebradas.

El túnel negro absorbe
hasta la última gota de oxígeno.
No puedo respirar,
no te puedo ver,
no puedo seguirte en el vuelo.

La brisa se vuelve viento,
me entrego a sus vaivenes.
Como hoja seca
me deslizo en el espacio.
Los ocres me invaden
Siento el crujido en el alma

Leve asciendo...
Las nubes escasas me reciben.
Luis en su globo milticolor
la sonrisa amplia
ojos chispeantes.
Siento la caricia añorada.
La voz ronca y suave
me habla...
Negrita, no jodás...

El primer rayo de sol
toca mi frente.
Mis ojos rojos
de tanta ausencia.

Imagen: Egon Schiele, Mujer sentada, con la rodilla en alto, 1917

3 comentarios:

  1. Hilda, Luis siempre estará en su globo multicolor,
    o en el vuelo de algún ave acariciando con el
    viento tu cara, la ausencia duele, pesa, araña,
    es recuerdo, es la vida que pasa ante los ojos
    cada día para demostrarnos que estamos vivos...
    Bello poema, con dejos de amor ausente.

    Un abrazo

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  2. Cuántas ausencias se van acumulando a medida que transcurre el tiempo........ cómo duele! cuánta añoranza...........
    Por suerte, también se suman nuevas presencias que renuevan nuestro "querer" en la vida........ beso Isa

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  3. Roberto, sí estará siempre. Tuve necesidad de escribir algunas palabras ya que no podía hablar.
    Estará en el aire, en un zorzal, en mis pasos, en mi genio...
    Gracias Un abrazo.

    Isa, Sí nuevas vidas llegan, llegan niños, amigos, gente que empezamos a querer, que nos alegran y nos empujan al disfrute, a saborear esta vida maravillosa.
    Considero que en nuestro mundo cada uno tiene su lugar inamovible y, el de él es inalterable.
    Estas palabras las escribí el otro día cuando algo me "avisó" que, en ese momento, yo tenía exactamente los mismos años, días, horas, hasta el mismo empuje y las mismas ganas de vivir que tenía él cuando se fue.
    Cuando los zorzales me soplan al oído estas cosas, es cuando sigo siendo "La Negrita".
    Luis fue mi viejo, fue la persona que me señaló caminos posibles como un verdadero Maestro...
    Un abrazo

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